Reseña #18 Diez Cosas Que Hicimos (y que probablemente no deberíamos haber hecho)

¡Hola bigotudos! Siallys y yo estamos seguras de que alguno de vosotros la habéis liado alguna vez. Yo por ejemplo, una noche de verano, tras un partido de fútbol me metí con unos amigos vestidos a la una de la mañana en una piscina, y cuando llegué a casa ¡Uy, la que me cayó!  Pero bueno, supongo que son locuras que se hacen en tu vida y experiencias de las que puedes aprender, yo aprendí que si no quería quedarme durante una semana sin salir de noche, no debería haberme bañado vestida. ja, ja Este libro se titula "Diez cosas que hicimos (y que probablemente no deberíamos haber hecho)".

Ficha técnica

Título: Diez cosas que hicimos (y que probablemente no deberíamos haber hecho)
Autora: Sarah Mylnowski
Editorial: Alfaguara
Páginas: 401
Precio: 14,50€

Me llamo April, tengo 16 años y llevo un año viviendo en casa de mi mejor amiga, ¡las dos solas! Aún no sé como conseguí que mi padre me dejara. Bueno, tal vez se me olvidó comentarle que la madre de Vi no iba a vivir con nosotras. Y, claro, luego se lió todo: compramos el jacuzzi, llegó la esperada noche con Noah y lo de la fiesta... Mentiras diversión, amor, familia y algunas cosas que hicimos...y que probablemente no deberíamos haber hecho.

 
El libro es entretenido, llama la atención y está bien, pero cuesta meterse dentro de él, cuesta meterse en la piel de April porque no describe mucho a los personajes. Las historias alocadas de las dos protagonistas hacen que te pases riendo la mayoría del libro, y engancha, engancha bastante, los secretos que esconden las protagonistas y el "¿Qué pasará después?" hace que tranquilamente te leas el libro en un día. ¿Logrará April esconderle a su padre todo lo que han armado durante ese año o acabará por contarle la verdad?

Me desperté de golpe. Una sirena de policía.
¿La policía estaba delante de mi casa? Seguro que dispuesta a arrestarme por organizar fiestas para menores, exceso de besuqueo y jacuzzi abarrotado.
Un momento.
Cerebro en posición de encendido. No, no se trataba de la poli. Lo que sonaba era mi móvil: el tono de llamada de mi padre.
Lo que era peor todavía.

Muy recomendable

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