Reseña #142 Sin Aliento

Autor: Ilsa J. Bick

Editorial: Círculo de Lectores Nº de páginas: 336
Saga: Autoconclusivo
Precio: Descatalogado
ISBN: 9788467254099
Sinopsis: Han pasado años desde que Jenna a punto estuvo de morir. En aquel entonces, ella también se quedó inmóvil, paralizada por el miedo que invadía cada una de sus células, hasta que oyó la voz de su hermano, como un salvavidas que podía tirar de ella y extraerla de aquel mar de fuego. Ahora, mientras tirita medio muerta de frío, el agente Pendleton le pide que cuente la historia que acaba de ocurrir. Quiere la verdad, como si la verdad tuviera una entidad propia, como si pudiera construirse con palabras. Ante una grabadora, Jenna cuenta lo que no ha querido compartir con nadie: la temporada que pasó en el siquiátrico, los motivos por los que escribe a su adorado hermano, destinado en Oriente Próximo, el porqué le resulta tan irresistible hacerse daño a sí misma... Y también los problemas de su madre con el alcohol, la hipocresía de su padre y, sobre todo, su relación con el profesor Anderson, que tan considerado fue con ella desde el principio. Su voz guía a quien quiera escucharla por un laberinto de giros inesperados, en el que no hay blanco y negros, y en el que, aunque hace ya mucho que dejó de creer en los cuentos de hadas, aún es posible descubrir dónde se ocultan los auténticos monstruos.

No sabía que esperarme de esta novela. Un día mirando qué tenía por el e–book lo encontré y tras leer la chocante sinopsis, decidí empezarlo. Una vez comenzado descubrí que esta autora ha publicado Cenizas con la editorial Nocturna.

Sin Aliento comienza con el rescate de nuestra protagonista Jenna Lord, que casi muere congelada en un lago, narrado en tercera persona. A continuación, el libro continúa cuando Bob, el detective responsable de la investigación, le da una grabadora en la que Jenna, esta vez en primera persona, nos va contando lo que le llevó al lago antes de que todo ocurriera.

Con lo de la grabadora y las cintas, probablemente os haya recordado a Por Trece Razones de Jay Asher. Pues bien, no es solo esto lo que ambos libros tienen en común, también coinciden en hablar del suicidio.

La vida de Jenna es un tanto complicada, y sinceramente, aunque sea un poco tétrico y hable de un tema difícil, me ha parecido un buen libro para desahogarse. ¿Nunca habéis oído que cuando tenemos problemas lo mejor es leer u oír problemas ajenos para sentirnos mejor? Pues yo, estando en esos días en los que se te junta todo, fue cuando comencé a leerlo y creo que ese es uno de los motivos por el que me ha encantado.

En cuanto a los personajes, me gustaría destacar al señor Anderson, es uno de esos profesores que además de enseñarte su materia, están ahí como guías para sacarte de la mierda y echarte una mano cuando te sientes sola. Además, Bob ha sido un personaje que al principio comienza siendo intrigante y cuando los cabos se unen nuestro punto de vista sobre él ya no vuelve a ser el mismo.

Además, otro punto positivo de la novela es que aparecen muchos títulos y nombres conocidos, se mencionan autores como Shakespeare, Jane Austen; películas como Star Trek, Apocalypse Now; y también aparecen citas de un libro en el que se habla de la vida de Alexis Depardieu, autora que adjudican a Jenna para un trabajo de inglés, una redacción en la que tienen que hablar del finale fatale del autor que les haya tocado.

Os dejo una que me ha marcado mucho por aquí:

Hay personas que mueren por una causa, y decimos que han realizado el supremo sacrificio. Los llamamos mártires, y jamás ponemos en duda su sinceridad.

Sin, embargo, muchos otros pasan la vida entera buscando algo –o a alguien– por lo que valga la pena morir, y eso es muy distinto. Ésos son los solitarios y los desesperados, temerosos de que sus vidas no tengan sentido. Anhelan la bala, sólo si es otro el que aprieta el gatillo.

En general, el libro es ameno y rápido de leer, en gran parte debido al estilo sencillo pero metafórico de la autora.

El final es inesperado, parece que sabes por dónde van a ir las cosas pero te equivocas. La autora deja el final abierto, pero me parece genial que sea así para que el lector decida como le gustaría que terminara el libro ya que hay como dos salidas.

Un último punto fuerte de la novela que me gustaría destacar es que me ha parecido importante el hecho de que la autora sea psicóloga ya que sabe meterte indirectamente en diferentes puntos de vista y jugar con tu mente hasta llegar a confundirte haciéndote dudar de quién confiar o de qué lado estar.

¿Y vosotros bigotudos? ¿Lo habéis leído? ¿Os ha gustado? ¿Lo leeréis? ¡No dudéis en comentar!