Conociendo Autores #29 - Desiree Bressend

¡Hola bigotudos! Hoy os traemos un Conociendo Autores de una autora a la que deberíamos haber conocido en persona en el último Club de Lectura que hubo en Avilés antes del confinamiento, al cual no pudimos asistir. Esperamos que os guste mucho la entrevista, tanto como a nosotras haber preparado las preguntas, se trata de una entrevista un tanto especial porque nos vamos a adentrar en el mundo del cómic y el guión. Os prometimos entrevistas y aquí estamos con la nueva tanda de entrevistas.

En el Conociendo Autores de hoy hablamos con Desiree Bressend, autora de La llamada del Bosque de los Suicidas, del cómic de El ministerio del Tiempo y de 1937: La batalla de Guadalajara. Además, ha participado en varias antologías y trabajado con varias revistas de cómics y videojuegos.

Escribiste la historia para el cómic de La llamada del Bosque de los suicidas y yo desde el momento en que lo leí me planteé la siguiente duda ¿qué se hace primero en el mundo del cómic, el texto o las ilustraciones?

Me parece que esta pregunta puede ser una buena oportunidad para conocer el mundo del cómic y no sólo mi caso, así que procuraré generalizarla todo lo posible.

Primero se realiza el guion, en cómic hay dos maneras de trabajar: con un plot o con un full script.

En el plot sólo se narra lo que sucede en la historia de manera general, dejando al dibujante elegir diseños, la distribución de la página, etc. Una vez que se ha realizado el apartado gráfico el guionista vuelve a retomar el resultado para incorporar los diálogos. Esta es la manera en la que por ejemplo trabajaba Stan Lee.

En el full script se indica al dibujante cuántas viñetas hay en cada página, la diagramación y por supuesto la documentación visual necesaria, aunque se deja en manos del dibujante la elección de los encuadres y la distribución de los personajes dentro de la viñeta. Esta es la forma de trabajar de Neil Gaiman o Kurt Busiek, por ejemplo.

Hay una variante del full script en el que se llega a indicar todo (incluso lo que se ha de dibujar) como hace Alan Moore, pero suelen ser pocos muy casos.

Yo creo en una combinación de ambas maneras para mi trabajo y sobretodo en priorizar el guion como una herramienta con la que va a trabajar todo el grupo creativo (dibujante, entintador, colorista, rotulista y editor). Me esfuerzo particularmente en localizar toda la documentación posible y explicar las sensaciones que trato de generar en el lector.

¿Cuál crees que fue la parte más difícil del proceso de creación?

En el caso de La llamada del Bosque de los suicidas (Amigo Comics en EEUU y Karras Comics en España) tenía la responsabilidad de ser fiel a la primera parte de la historia El Bosque de los Suicidas, de Juan Torres y Gabriel Hernández Walta, pero a la vez crear, junto a Rubén Gil, un cómic que se pudiera leer de manera independiente, pero que tuviera la esencia del terror de esa primera parte.

Elegí a uno de los personajes del cómc original como es Ryoko para conocer mejor otra parte de su mundo y su vida que no habíamos explorado todavía.

¿Qué nos puedes contar sobre el mundo del guión? ¿Hay alguna anécdota divertida que te saque una sonrisa en estos tiempos difíciles?

Muchas veces te preguntan en las convenciones de cómic que si les puedes hacer un dibujo o una historia en ese momento; o (en el caso audiovisual) si se lo inventan los actores.

También me ha llegado a pasar en las firmas que llevasen todas mis fotos de, mi entonces personal, Facebook. No fui capaz de decir nada, aunque algo intranquila me sentí (risas) simplemente las firmé. Hoy es una buena anécdota.

Seguramente haya personas que se pregunten qué diferencias hay entre guionizar un cómic, un videojuego y una serie ¿podrías aclararlo brevemente?

Los códigos son distintos porque como dijo Marshall McLuhan:«el medio es el mensaje». Lo que sí tienen en común es que son una herramienta para que se trabaje con ellos, no son el resultado final y generalidades como la construcción de los personajes o los diálogos.

Sabiendo todo esto tienes que preguntarte «¿Qué tiene que ofrecer esa herramienta específica?». Por ejemplo en el caso de un cómic pensar una unidad de página, en el caso de un videojuego pensar en cómo tus mecánicas pueden representarse en el HUD o en el caso de una serie saber minutar de manera aproximada tu guión.

Sabemos que hay gente que toma té mientras escribe, enciende una vela, o sólo escribe cuando van a una cafetería, ¿Tienes alguna manía a la hora de escribir?

Intento no tenerlas para pensar que no las necesito para escribir, aunque me encantan los cafés, el rooibos, los Monster y quedarme las noches en vela escribiendo.

Viendo tu entrevista en T3chFest veo que hablas sobre que quizás la televisión sea una forma de consumo, hace unos meses un profesor en la carrera que impartía también en el Grado de Economía me dijo que los spoilers en realidad eran una herramienta del consumismo y que servían para que devoráramos las series en Netflix o los libros lo más rápido posible. ¿Cuál es tu opinión respecto a los spoilers?

Creo que si alguien te pide específicamente que no le desveles alguna parte de la trama hay que respetarlo, puede que sea su manera de vincularse con la historia. Yo he aprendido a convivir con ellos, algo malo de dedicarte a construir historias es que a veces ya sabes cómo va a terminar una historia.

Cuando realizas un análisis amplio, académico o profesional, los considero imprescindibles porque vas a tratar precisamente cómo se han elaborado todas esas «trampas». Quizás esa sea la clave, para mí no está en lo que se cuenta, sino en cómo se cuenta. En la serie de Chernobyl consiguen una doble lectura, un ritmo y una cinematografía en la que no te importa conocer ya la historia.

Con la situación actual (COVID-19), al no poder salir de casa y no tener tantos estímulos, ¿crees que se te ha hecho más complicado el escribir?

Antes del COVID yo decía «escribiré ese proyecto cuando tenga tiempo» u «ojalá el mundo pudiera pararse»; pero no pensaba que iba a darse en una situación tan aterradora que pudiera llegar a bloquearte la concentración.

A medida que pasa el tiempo veo como un exterior fantasma parece polarizarse y eso a veces me está dando temas para escribir y a veces para mojar la ansiedad con crispies y no hacer nada más (Risas).

Creo que tendremos una generación marcada por historias que se escriban ahora o a raíz de este suceso, aunque no traten necesariamente de pandemias. Al igual que el 11 de septiembre cambió la narrativa de inicios del S.XXI

¿Tienes algún proyecto futuro en mente o del cuál nos puedas contar alguna primicia?

He aprendido a hablar de los ejemplares impresos o las series emitidas. Ya que muchas veces sale más tarde aquello que has escrito antes o se queda en la opción de desarrollo.

Visto así funciona como anécdota de la tercera pregunta (risas).

¿Puedes dar algún consejo a aquellas personillas que quieran dedicarse al mundo del cómic?

Paciencia, no tienes que demostrar nada a nadie, lo bonito es encontrar tu voz y eso sucede con el tiempo.

El mundo no es una competición, es una comunidad.

Acumular toda una libreta de «fracasos» significa que te estás moviendo.

Termina las cosas, siempre pueden tener una segunda versión si hay una primera.

Siempre solemos pedir como despedida que nos hagáis recomendaciones. En tu caso, nos gustaría que nos recomendaras tres cómics y tres series que creas que merece mucho la pena leer.

COMIC

1. Uno clásico: Maus de Art Spiegelman

2. Uno periodístico-documental: Crónicas de Pyongyang de Guy Delisle.

3. Uno nuevo: The wicked + The Divine Kieron Gillen y Jamie McKelvie.

SERIES

1. Una clásica: Mad Men. (Varias plataformas).

2. Una periodística-documental: McMillions (HBO).

3. Una nueva: Unorthodox (Netflix).

A nosotras nos ha parecido una entrevista super interesante. Esperamos que la hayáis disfrutado, jeje. Dejadnos en comentarios a qué autores queréis que entrevistemos para futuras ocasiones. ¡Nos leemos!