Autora: Chloe Walsh
Editorial: Montena
Nº de páginas: 704
Saga: Los chicos de Tommen #02
Género: Romántica - New Adult
Fecha de publicación: 2024
Precio: 18.95€/8.54€ (Ebook)
ISBN: 9788419746993
Puntuación: ⭐⭐⭐⭐⭐
Comprar en Casa del Libro
Sinopsis: Enamorarse fue fácil. Lo que viene después es el verdadero desafío... Tras una devastadora lesión que lo ha mandado al banquillo, Johnny Kavanagh se aferra como puede a sus sueños. Perdido, inseguro y necesitado de consuelo, decide desentrañar los misterios que envuelven a la chica de ojos azules en la que no puede dejar de pensar ni un minuto. Guardar un secreto nunca ha sido un problema para Shannon Lynch. Sabe bien que los demonios y los villanos no solo acechan en los cuentos, sino también en el mundo real. Traumatizada tras volver de Dublín y desesperada por proteger a sus hermanos pequeños, Shannon acaba participando en la misma pantomima de siempre mientras su futuro se desmorona frente a sus ojos. La única forma de protegerse es levantar un muro a su alrededor. Solo un chico será capaz de saltar ese muro, el mismo que le ha robado el corazón. Sin embargo, están a punto de salir a la luz secretos que cambiarán sus vidas para siempre. ¿Sobrevivirá a todo ello el amor entre Johnny y Shannon?
Terminé este libro hace más de dos meses y esperé hasta ahora para hacer la reseña por la dureza de la historia de Shannon y su familia. Esta segunda entrega de Chloe Walsh me ha provocado sentimientos encontrados. Os resumo la historia (sin spoilers) 👇
Tras la última escena de Binding 13, Shannon se encuentra débil y desorientada, sin saber cómo abordar su situación familiar. Aunque siente alivio por haberse separado durante un tiempo de su padre, su futuro se muestra incierto. Él está libre de la cárcel y ella no sabe cuando se lo volverá a encontrar. Por su parte, Johnny sigue en proceso de recuperación, y pese a lo duro que está siendo, ni sus padres ni el dudarán ni un segundo en mantenerse al lado de Shannon. El camino para superar la mala racha de Shannon será duro, pero tanto ella como sus hermanos estarán a punto de cambiar sus vidas.
Me ha encantado el proceso de construcción de la relación entre los protagonistas. Es lento, en el que ambos crecen juntos enfrentándose a los problemas. ¿Quién le iba a decir a Shannon que aquel chico que le lanzaría una pelota en la cabeza sin querer fuese a ser un salvavidas?
Confieso que en ciertas escenas he tenido que parar de leer; ha sido realmente duro. No quiero hacer spoilers, pero si lo habéis leído, sabéis de qué escena en concreto os hablo, especialmente después de todos los enfrentamientos que han tenido Johnny y la madre de Shannon.
También quería destacar en esta reseña que a los padres de Johnny ¡hay que hacerles un monumento! Su apoyo incondicional hacia Shannon es admirable, y el cariño que muestra la madre al resto de sus hermanos también lo es. Me ha encantado que se les diese más protagonismo a ellos, pues también sufren. Además, me ha dado la sensación de que, a pesar de ser hermanos, todos tenían personalidades muy diferentes y la manera en la que les ha afectado todo es diferente para cada uno, lo que demuestra que pese a haber sufrido la misma situación familiar, cada persona es un mundo y sufre de una manera.
Pese a que el romance de esta novela y la manera que han tenido de afrontar esta situación los protagonistas me haya gustado mucho, quería recalcar que estos problemas son serios y se dan en la vida real. El amor no lo cura todo y creo que la autora ha sabido transmitir eso, Johnny supo distinguir entre amor y apoyo emocional.
Keeping 13 ha sido una lectura muy emotiva en la que he derramado más de una lagrimilla en varios capítulos. Os la recomendaría, pero supongo que si estáis leyendo esta reseña es porque os habéis quedado a cuadros con el final de Binding 13 y necesitáis información de como sigue esto hasta que consigáis el segundo libro. Yo os aseguro que este es mil veces más duro que el primero.
Tras la última escena de Binding 13, Shannon se encuentra débil y desorientada, sin saber cómo abordar su situación familiar. Aunque siente alivio por haberse separado durante un tiempo de su padre, su futuro se muestra incierto. Él está libre de la cárcel y ella no sabe cuando se lo volverá a encontrar. Por su parte, Johnny sigue en proceso de recuperación, y pese a lo duro que está siendo, ni sus padres ni el dudarán ni un segundo en mantenerse al lado de Shannon. El camino para superar la mala racha de Shannon será duro, pero tanto ella como sus hermanos estarán a punto de cambiar sus vidas.
Me ha encantado el proceso de construcción de la relación entre los protagonistas. Es lento, en el que ambos crecen juntos enfrentándose a los problemas. ¿Quién le iba a decir a Shannon que aquel chico que le lanzaría una pelota en la cabeza sin querer fuese a ser un salvavidas?
Confieso que en ciertas escenas he tenido que parar de leer; ha sido realmente duro. No quiero hacer spoilers, pero si lo habéis leído, sabéis de qué escena en concreto os hablo, especialmente después de todos los enfrentamientos que han tenido Johnny y la madre de Shannon.
También quería destacar en esta reseña que a los padres de Johnny ¡hay que hacerles un monumento! Su apoyo incondicional hacia Shannon es admirable, y el cariño que muestra la madre al resto de sus hermanos también lo es. Me ha encantado que se les diese más protagonismo a ellos, pues también sufren. Además, me ha dado la sensación de que, a pesar de ser hermanos, todos tenían personalidades muy diferentes y la manera en la que les ha afectado todo es diferente para cada uno, lo que demuestra que pese a haber sufrido la misma situación familiar, cada persona es un mundo y sufre de una manera.
Pese a que el romance de esta novela y la manera que han tenido de afrontar esta situación los protagonistas me haya gustado mucho, quería recalcar que estos problemas son serios y se dan en la vida real. El amor no lo cura todo y creo que la autora ha sabido transmitir eso, Johnny supo distinguir entre amor y apoyo emocional.
Keeping 13 ha sido una lectura muy emotiva en la que he derramado más de una lagrimilla en varios capítulos. Os la recomendaría, pero supongo que si estáis leyendo esta reseña es porque os habéis quedado a cuadros con el final de Binding 13 y necesitáis información de como sigue esto hasta que consigáis el segundo libro. Yo os aseguro que este es mil veces más duro que el primero.
¿Habéis leído esta segunda entrega? ¿Qué os han parecido las escenas? ¡Nos leemos!
Publicar un comentario
Si comentas, te dejaremos un comentario en tu blog.
Por favor, NO hagáis SPAM, NI SPOILER y tratad a nuestros lectores con RESPETO.
NO QUEREMOS URLS.
Si queréis QUE SIGAMOS VUESTRO BLOG COMENTAD UNA ENTRADA, SOLEMOS DEVOLVER COMENTARIOS y si nos gusta, OS SEGUIREMOS.
Atte. Lady Moustache, Atenea y Luna